Me
encontré en el parque, juro que no adrede, espiando la conversación
entre dos niñas y dos niños que discutían sobre un quinto en
discordia. Por ignorar sus nombres, los identifico como A, B, C y D.
He aquí la transcripción completa sin omitir palabra.
A
– No.
B
– Sí.
C
– Pero si estaba…
D
– Viajando sin parar.
A
– ¿Durante tres años? Imposible.
B
– Tres años, sí.
C
– No.
D
– A lo mejor sí.
A
– Seguro que no.
B
– Te digo que sí.
C
– Sospecho…
D
– ¿Qué?
A
– Que ha estado tres años encerrado en casa de sus abuelos.
B
– Que no, cabezota.
C
– Antes has dicho que sí.
B
– Que no ha estado en casa de sus abuelos.
D
– ¿Y el viaje?
B
– Te digo que sí.
A
– ¿Y tú como lo sabes?
B
– He ido a verle.
C – ¿Adónde?
B – A su casa. Dónde si no.
D
– Lo que nos lleva a que no estaba con sus abuelos.
B
– Estaba de viaje.
A
– ¿Tres años? Imposible.
B
– Llegaron hace tres días.
C
– ¿Quiénes?
B
– Él, sus padres y su hermana.
D – ¿Se fueron todos juntos?
B – ¿Tú qué crees? Es menor, no puede viajar solo.
A
– ¿Y ha cambiado mucho después de tres años fuera?
C
– ¿Sigue hablando nuestro idioma?
D
– ¿Ha traído alguna mascota rara?
B
– Pues…Francamente. Ha regresado muy quemado.
A,C,D
– ¿Quemado?
B
– Visitando un volcán al que creían dormido. De repente, por
sorpresa, se encendió y un trocito de lava le cayó en el dedo gordo
del pie izquierdo.
A,C,D
– ¿Y se lo quemó?
B
– Hasta la uña. En Australia, la de lejos muy lejos, la fuerza del
sol es tan grande que le ha dejado la nariz…
A,C,D
– Quemada.
B
– Y pelada. Cuando hicieron escala en Amazonas de la selva, se
declaró un gigantesco incendio y casi acaban como morcillas de
barbacoa. Al huir se tropezó y se…
A,C,D – Quemó.
B – Las manos. Desde entonces usa guantes. Al llegar a Pekín, de la China, confundieron el humo por niebla y salieron a correr, como hacen todos los días, para oxigenar los pulmones que por cierto acabaron…
A,C,D
– Quemados.
B – Les ha quedado una tosecilla crónica. En Tokio le dejó alucinado la cantidad de letreros luminosos que hay. Tantos que no podía dejar de mirarlos. Todavía ve pequeños puntitos negros y…
A,C,D
– Quemaditos.
B
– Cuando fueron al Polo de arriba…
A
– Menos mal, un sitio fresquito.
C
– Menudo descanso.
D
– Por lo menos se aliviaron.
B – Haciendo un selfie, el hielo, inesperadamente, se rompió y dejó a toda la familia posada en un iceberg, el cual emprendió rumbo a la nada. Cuando los rescataron, al cabo de unos dos días, tenían todos la cara…
A,C,D
– Quemada.
A
– ¿Qué os parece si vamos mañana a la piscina?
C
– Por favor.
D – Anuncian que mañana entra una súper ola de calor.
A
– Le podíamos invitar y así nos cuenta sus aventuras.
B
– No creo que quiera. Dice que no saldrá a la calle hasta que
llegue el invierno.
C
– Él se lo pierde.
D
– ¿Seguro?
El silencio se adueña de los cuatro que emprenden camino hacía algún lugar desconocido para mí. Un lugar que a buen seguro tendrá su lado caliente.